El certificado de profesionalidad es el instrumento de acreditación oficial de las cualificaciones profesionales, que acredita la capacitación para el desarrollo de una actividad laboral con significación para el empleo y asegura la formación necesaria para su adquisición. Cada certificado de profesionalidad acredita una cualificación profesional del Catálogo Nacional de Cualificaciones Profesionales aunque, de manera excepcional, puede haber certificados que acrediten sólo una parte de la cualificación. Se estructuran en módulos formativos e incluyen un módulo de formación práctica en centros de trabajo. La superación de este módulo de prácticas es imprescindible para obtener el certificado de profesionalidad, si bien está la opción de obtener la exención de este módulo.
Para el ejercicio profesional de algunos empleos en algunos sectores es imprescindible la obtención previa del documento que certifica la competencia profesional de la persona trabajadora. Esta documentación puede ser un certificado de profesionalidad, un título de formación profesional, o bien otros tipos de carnés profesionales que acreditan la calificación profesional.
Cada vez hay más sectores que valoran los certificados de profesionalidad como documento acreditativo de la cualificación profesional y tienen validez en todo el territorio español y, además, la normativa europea permite el reconocimiento de las cualificaciones profesionales acreditadas en la Unión Europea, de manera que facilitan la movilidad geográfica.
Estar en posesión de un certificado de profesionalidad sirve para acreditar una cualificación determinada; facilitar la inserción laboral y la selección de personal; favorecer la transparencia del mercado de trabajo ya que muestran de manera explícita qué es lo que sabe hacer cada trabajador o trabajadora; posibilitar la convalidación de las unidades de competencia que coincidan con los títulos de Formación profesional; y por último, para facilitar el aprendizaje permanente de las personas trabajadoras.